En el primero de los casos, elementos de la PGR y de la Policía Federal en un operativo de más de cuatro horas llegaron hasta el lugar de las acciones en la colonia Bosques del Country, en el municipio de Guadalupe.
A partir de dos puntos, los efectivos rodearon el acceso principal a la colonia y cerraron el paso de la Avenida Bosques y las calles Maple, Sabino, Pino, Cedro y Chopo.
En la primera intervención, los federales detuvieron a dos policías municipales de Guadalupe que brindaban protección a los sicarios y a ocupantes de una camioneta tipo Voyager, con placas SLV 757. La unidad 39 de la corporación policiaca estaba estacionada en la calle Pino, frente del domicilio marcado con el número 2047 en donde se detuvo a los sicarios.
Al mismo tiempo, en la calle Maple, esquina con Chopo, otro grupo de federales ingresaban al domicilio marcado con el número 2041, el cual era utilizado aparentemente como casa de seguridad donde la chapa de la cerradura de la puerta principal fue forzada.
Dentro de la casa mantenían secuestradas a varias personas, pero no se dio a conocer el número.
Por otro lado, Francisco Martínez Ramírez, de 60 años, jefe de seguridad del Penal del Topo Chico fue “levantado” por un grupo armado la tarde del viernes y este sábado su cuerpo mutilado fue abandonado en una caja en el interior de un vehículo con reporte de robo.
Estaba en el cruce de las calles Rodrigo Gómez y Próceres, a unas cuadras del penal. Dentro de la caja estaba su ropa y la radiofrecuencia sin batería
En el lugar, los investigadores encontraron también un narcomensaje, pero no se dieron mayores informes.
La semana pasada, el cuerpo de la celadora Janeth Esmeralda Hinojosa Santiago, de 34 años, fue mutilado y lo dejaron en una caja que dejaron en las cercanías del penal.
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